Para evitar el retraso en la entrega de tus proyectos TI, debe tenerse en cuenta la seguridad desde la fase de diseño.
Seguridad y agilidad no son incompatibles. Las empresas a menudo cometen el error de sacrificar las medidas de integridad de los sistemas de información bajo el pretexto de que ralentizan la innovación, suponiendo que configurar controles de seguridad demorará sus proyectos. Dan por hecho que significa invertir recursos significativos en funcionalidades de seguridad, que implican retrasos en las entregas cuando lo que el mercado reclama es mayor agilidad y velocidad. No obstante, si un proyecto no está correctamente protegido directamente fracasará, puesto que costará corregirlo a posteriori y afectará a la imagen de la empresa.