El cloud computing es un concepto muy utilizado y comentado en el día a día de las empresas y particulares. Se trata de un modelo de negocio basado en soluciones tecnológicas que permiten a las empresas controlar su gestión de forma óptima.
Los partidarios de la computación en la nube, ponen de relieve las ventajas innegables de este modelo como la escalabilidad de los procesos y sistemas, sus flexibilidades así como el pago por uso. Son herramientas muy prácticas y ágiles tanto en su implantación como a su uso por todos los colaboradores de la compañía.
En efecto, el cloud computing logra centralizar los recursos, el conocimiento, mejora las buenas prácticas y por ende, fomenta la productividad. Sin embargo, los detractores ponen de relieve un argumento de peso: la seguridad.
Este es un punto en el que muchos proveedores de servicios cloud hacen hincapié. Sin embargo, garantizar la seguridad y la calidad de cualquier servicio TI requiere requisitos que no todos pueden brindar. Claranet, que cuenta con más de 15 años de experiencia en servicios gestionados e implantación de soluciones TI , presta una gran atención a este argumento, que a menudo frena a las empresas a la hora de impulsar su negocio a la nube , convirtiéndose en uno de los ejes del trabajo diario y de las ventajas competitivas de la compañía. “Los servicios bajo modelo cloud, tienen que beneficiarse de todas las garantías con las que cuentan el resto de servicios, como la seguridad y la continuidad de servicio.” nos explica Josep Salom, Director de Operaciones en Claranet. Con esta visión, la multinacional, cubre la mayoría de riesgos que amenazan el complejo entorno de redes de comunicación y plataformas de cloud computing.
Cuidando en especial la confianza que depositan las empresas en Claranet, tanto respecto a la calidad de los servicios, como en los términos contractuales y de confidencialidad, Claranet cumple con las normativas legales más exigentes. Además de estar abierta a auditoría externa.
Las dos mayores garantías que tiene que aportar una empresa proveedora de soluciones cloud a sus clientes son:
- Facilidad en la gestión de contenidos.
- Seguridad perimetral.
Si hablamos de gestión de contenidos, tenemos que precisar que es fundamental para asegurar el óptimo rendimiento de una red, asegurando que sus aplicaciones críticas dispongan del ancho de banda necesario para su correcto funcionamiento y el acceso a ellas de forma segura y eficiente. En algunos casos la implementación de políticas de calidad de servicio (QoS) en las líneas de conectividad es una ventaja para asegurarse un funcionamiento realmente óptimo. La plataforma tiene que facilitar a los usuarios tanto la carga como el acceso y la compartición de contenido. El objetivo es poder almacenar y recuperar fácilmente y de forma segura estos datos.
En caso de migración cloud, es imprescindible planificarla y medir el ROI del proyecto y eso sólo lo puede ofrecer un proveedor de confianza. La ventaja de elegir un proveedor independiente y no vinculado a ningún operador de telecomunicación garantiza el acceso a una amplia gama de tecnologías de acceso (ADSL, SHDSL, Ethernet, Fibra óptica, conexiones móviles 3G, etc.).
Y desde el punto de vista de la seguridad los argumentos deben ser mayores, la seguridad perimetral tiene que ser diseñada para proteger los datos de las empresas mediante el bloqueo de tráfico no permitido. Por esta razón, los Firewalls, Backup de Datos y Antivirus / Antispam, tienen que ser gestionados y configurados a medida del cliente para evitar cualquier problema, así como los servicios de Backup online que garantizan la seguridad y confidencialidad de las copias externalizándolas. Respecto a las soluciones Antivirus y Antispam, debemos reseñar que éstas son también herramientas que hay que tener en cuenta a la hora de elegir un proveedor de servicios TI, realizando redirecciones del correo electrónico a servidores de alta capacidad y que brinden un filtrado exhaustivo de spam y virus.
En definitiva, la seguridad en entornos TI es el aspecto más importante a la hora de implantar procesos, soluciones y herramientas. Sin embargo para las organizaciones, la elección de un buen proveedor sólo se puede hacer conociendo sus puntos fuertes tanto como sus debilidades y asegurarse que el proveedor puede cubrirlas. Por esta razón, si la plataforma está gestionada según la definición de un Contrato de Nivel de Servicio (SLA) detallado y preciso, y se beneficie de un seguimiento exhaustivo para poder asumir el rendimiento acordado, resulta muy interesante y seguro. Además una experiencia en hosting y gestión de redes siempre es un plus para poder cubrir y resolver cualquier problema.